La emulsión de queso es más que una simple crema para untar

Ofrece una nueva perspectiva del queso: más suave, más versátil, más sorprendente. Embutidos Perrino transforma el queso de oveja curado (con más de 20 meses de curación) en una delicia cremosa que conserva toda la intensidad del producto original, pero con una textura ideal para nuevas experiencias de degustación.

Todo empieza con materias primas de alta calidad: queso de oveja Gran Reserva, aceite de oliva virgen extra e ingredientes naturales. Sin conservantes ni colorantes. El resultado es un producto gourmet disponible en dos versiones muy diferentes, pero igualmente irresistibles: con miel o con un toque picante. ¿Y lo mejor? No hace falta ser un chef para disfrutarlo. Simplemente abre el frasco y deja que haga su magia.

Dulce o picante: Dos maneras de disfrutar de una buena emulsión de queso

Emulsión de queso con miel: Una explosión de contrastes que deleita desde el primer bocado. Su sabor recuerda al postre «Queso con Membrillo», pero con más cuerpo e intensidad. Comienza con notas dulces de miel de flores silvestres y termina con la profundidad salada del Gran Reserva. Es ideal como un aperitivo inesperado o como un postre salado original. Pruébelo sobre tostadas de nueces, con fruta fresca o incluso con mermelada ligera. Además, aporta una textura cremosa y distintiva a una tabla de quesos.

La emulsión de queso picante es pura intensidad: contiene pimientos de La Vera y especias que le aportan un toque ahumado, cálido y profundo. Recuerda al sabor de las patatas Revolconas, pero es untable. Perfecto para quienes buscan carácter sin renunciar a la elegancia. Sírvalo en canapés con embutido ibérico, úselo como salsa rápida para pasta o incluso como base para tostadas con cebolla caramelizada.

Ambas versiones abren una nueva forma de disfrutar del queso. Su textura permite un toque divertido y original en la cocina, y su sabor se mantiene robusto incluso en combinaciones atrevidas. Solo necesitas un buen pan, un poco de imaginación y ganas de sorprender.

Un formato pequeño para muchas posibilidades

Cada emulsión de queso se presenta en un frasco de 125 gramos: el tamaño perfecto para degustar, compartir o regalar. Son ideales para cenas informales, aperitivos improvisados o cestas gourmet con un toque personal. Simplemente abre el frasco y añade pan crujiente, frutos secos o una copa de vino. La experiencia está completa.

También son un aliado ideal para la hostelería: son fáciles de servir, no requieren preparación previa y ofrecen un resultado visual y sabroso que marca la diferencia. Si buscas un producto con un sabor atemporal y una presentación moderna, estás en el lugar adecuado.

El secreto está en los ingredientes

Que sea una emulsión de queso no significa que sea menos queso. Todo lo contrario. El sabor de la leche de oveja curada se conserva, se redondea con el aceite de oliva virgen extra y se realza con el dulzor natural de la miel o el poder del pimentón. Todo está en equilibrio para que la experiencia evolucione: comienza con suavidad, se desarrolla y perdura.

Por eso es más que una simple crema: un pequeño lujo para quienes aprecian los detalles. Una forma diferente de disfrutar de los sabores tradicionales sin salir de casa.